Hace unos meses, distintas marcas de moda, a nivel global, decidieron que la nueva moda era la ropa "genderless", o sea, no influida por el género. Wow, qué bien, ¿no? ¿Cómo habrán logrado inventar ropa nueva para crear una pequeña tercera opción en la habitual dicotomía "para hombre" y "para mujer"? La respuesta es... que no lo han hecho.
La línea neutral de Zara o "cómo se visten la mayoría de tíos que conozco"
Todo intento de encontrar imágenes y noticias acerca de ropa "neutra" refiere a lo mismo: ropa de colores apagados y aburridos (dominan los grises y colores deslucidos) que, lejos de ofrecer una tercera opción al consumidor, sólo re-etiqueta productos que llevan vendiéndose toda la vida como moda masculina.
Otras páginas se hacen eco de una supuesta moda "ajena al género", que bien podría llamarse la "moda de bolsa de basura": tela sin forma, unas cuantas tallas por encima de la tuya y que oculte tu cuerpo. No sonreir y estar en blanco y negro es opcional pero ayuda a ser neutral, por lo visto.
La moda es un terreno de juego diferente, donde muchos diseñadores experimentan todos los años y crean trajes y complementos que rara vez salen de una pasarela. Ese arte suyo, expresado a través de materiales, colores y formas, es algo totalmente diferente a lo que la persona media espera de "la moda".
La chavalada flipando con la alegría de llevar ropa neutra
Cuando vamos a comprar ropa, muy poca gente busca aquel modelito convertible mitad pavo real mitad leopardo del Serengueti que tiene un bolsillo especial para un chubasquero que se despliega con un sensor de humedad y expulsando humo. La mayoría buscamos algo que sea cómodo, que nos dure y, a poder ser, que cumpla con nuestro criterio estético.
Que este criterio sea algo que está terriblemente influenciado por el cisheteropatriarcado ya es algo que no tanta gente es capaz de discernir, y es por eso que hubo tanto revuelo en su día: los medios tradicionales y el mainstream poblacional aparecieron sorprendidísimos de que una idea así hubiera podido surgir. ¡Ropa neutra! ¡Ni "de hombre" ni "de mujer"! ¿Cómo ibamos a saber dónde comprar la ropa? El caos y la anarquía se cernían sobre un mundo que... eh... ha seguido exactamente igual.
El mundo no ha cambiado en nada, más allá de unos cuantos titulares alarmistas y unos cuantos comentarios desafortunados. Y eso es lo que a mí, personalmente, me preocupa. Me preocupa que parezca que no ha cambiado nada. Me preocupa que se haya pasado por alto algo que lleva años (por no decir más) acechando: lo masculino se convierte en lo neutro.
Buscad cuanto queráis, no veréis una falda, un vestido, unos tacones... en ninguna zona "neutra". Al parecer esas prendas tienen una "carga de género", la percepción de que pertenecen a una categoría diferente, no neutral. Sin embargo, pantalones y sudaderas son el atuendo neutro por excelencia.
¿Cómo hemos llegado aquí? ¿Cómo han conseguido instalarnos ese tren de pensamiento? Lo que no es "de mujeres", es neutro. Y como es neutro, unifica. Y como unifica, perdemos identidad en pro de una supuesta mejoría derivada de la unificación. Porque, está claro, lo femenino es negativo, no podemos permitir que algún chaval joven y perdido se ponga una falda bajo la etiqueta "neutro". Sería el final de la masculinidad, civilizaciones enteras caerían por un fallo de etiquetado.
Cada día tengo más claro que es necesario reivindicar la diferencia como valor y la identidad como factor de subsistencia.
Hay un dicho en internet, "White people have no culture", "la gente blanca no tiene cultura". Este dicho no implica que la gente blanca sea inculta o que no produzcan cultura, sino que hace referencia a cómo la cultura occidental ha sido la norma durante tanto tiempo que es la visión por defecto a nivel global. No tenemos que preocuparnos por defenderla, ni por expandirla, ni por si la siguiente generación de gente blanca conocerá sus orígenes y razones de existir.
Nuestra cultura no se ve "exótica", ni "primitiva", ni "anticuada". Somos la cultura dominante y por eso es la mejor, la más novedosa y la que nos parece normal, ¿por qué no iba a serlo? Así, nos resulta extraño, incluso ilógico, que personas de otras razas, de otros paises, de otras religiones, reivindiquen sus tradiciones y sus costumbres y se molesten al verlas descontextualizadas y mercantilizadas por aquellas personas que, hasta que pensaron en explotarla, la trataban como algo inferior y sin valor que podía erradicarse bajo la normalización de la cultura blanca occidental.
Esta relación entre opresor-oprimido y sus identidades culturales es, a mi parecer, perfectamente extrapolable al resto de situaciones de opresión. La asimilación del oprimido en la masa informe del opresor. Ahora es la ropa, porque es lo que nos ocupa, pero ayer ya fue el género y otro día lo será la sexualidad. Lo "neutral" es ser un hombre cisgénero heterosexual blanco, y cualquier otra identidad está definida en contraposición a esta supuesta neutralidad como algo negativo.
Los hombres no entienden qué puede haber de malo en que eso sea "lo neutro". Las personas cis no sienten una identidad de género. Las personas heterosexuales no comprenden que tu identidad sexual sea algo relevante y marcado en tu vida. Las personas blancas no entendemos cómo ser de cualquier otra raza te convierte automáticamente en un foco de desprecio y desconfianza. Y podemos leer, podemos tener amistades en esos grupos, podemos intentarlo muy fuerte, pero es muy complicado llegar a darse cuenta de cuan profunda es la brecha que se oculta tras "la neutralidad".
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